Nacimos en el campo y siempre nos alimentamos de lo que ahora producimos para muchas familias. Nuestro abuelo comenzó a trabajar en la agricultura hace 60 años y hoy estamos cumpliendo su sueño: darle vida a las tierras que tenía.
Llevar productos ecológicos al mercado local es una responsabilidad muy grande y nos llena de satisfacción saber que cada vez hay más españoles que valoran lo nuestro.
No somos solo un comercio local, somos una familia que ha encontrado en la tierra y en su cultivo una forma de vivir y mantenerse por más de 20 años. Por eso la cuidamos tanto y trabajamos sin fertilizantes artificiales u otros químicos. Queremos asegurarle a todas las familias, una fuente confiable de vegetales naturales.
Todo empezó cuando éramos muy pequeños para entender la riqueza que nos daba la tierra. Mi padre siempre se dedicó a la agricultura y cultivaba, sin ciencia pero con mucho amor, vegetales y frutas para venderlos en el mercado del pueblo. Nunca quiso utilizar fertilizantes químicos, nos decía que dañaban la tierra y quitaban el alimento. Ahora nosotros continuamos su legado y cultivamos en las tierras que él nos dejó y de la forma que él nos enseñó.
Este negocio nació como una forma de honrar a nuestros abuelos. Ellos nos enseñaron a valorar lo que los campos producían y a devolver a la tierra todo lo que nos da con un cuidado responsable. Siempre estamos pensando cómo entregar un producto de mejor calidad, 100% orgánico y cultivado con amor.
